La medida busca garantizar derechos fundamentales como la vida, la libertad y la integridad física del detenido, según explicó el presidente del tribunal, Gustavo Castiñeira de Dios.

El habeas corpus exhorta a las autoridades venezolanas a informar los motivos de la detención, el juez responsable del caso y a garantizar que Gallo tenga representación legal, contacto con su familia y asesoramiento de la Cancillería argentina. También solicita que sea presentado físicamente o de manera telemática ante la Cancillería.

El magistrado subrayó que, aunque el tribunal argentino no puede obligar al Estado venezolano, la decisión tiene validez ante organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos o la Corte Penal Internacional. Castiñeira agregó que no hay información oficial sobre el estado del gendarme, ni siquiera confirmación de que esté vivo, y criticó la falta de independencia del sistema judicial venezolano.