El sospechoso -un comerciante de un lubricentro de Río Negro, portaba el celular de uno de los chicos asesinados, y por ello fue aprehendido en esa provincia.

De esta forma, los investigadores siguen dos hipótesis: El mismo celular viajó de Varela a Río Negro, o bien se trata de dos celulares clonados. El detenido, quien asegura haber comprado el teléfono usado, afirmó que lo llevó a reparar a un lugar clandestino. 

MIRÁ TAMBIÉN:
Solicitan testigos de salvaje ataque a un joven ocurrido en sábado en Florencio Varela

Se recordará que los policías no encontraron los celulares de los menores en la escena del crimen, como así tampoco la bandolera de Josué y dinero que tenía en su interior.

La autopsia indicó que Paloma, de 16 años, y Josué, de 14, murieron como consecuencia de un traumatismo de cráneo, por lo que los homicidas utilizaron una piedra para golpearlos en la cabeza y matarlos, al tiempo que descartó que la joven haya sido víctima de un abuso sexual.