DÍA DEL MAESTRO
10/09/2019
“El docente es hoy es el eslabón más débil del sistema y no hay quién lo defienda”
“El docente es hoy es el eslabón más débil del sistema y no hay quién lo defienda”
Violencia social, padres que desautorizan a los educadores, y un sistema que lo avala. En el medio, los niños no aprenden a resolver sus conflictos, ni a responsabilizarse de sus conductas.
En ocasión del Día del Maestro, la psicopedagoga y educadora quilmeña Inés Noya señaló que en los tiempos que corren en la Argentina, la crispación social que estalla en las escuelas tiene como víctima al docente. 

Frente a esto, señaló, hay un sistema que no sólo deja hacer, sino que por el contrario, empodera a los padres para desautorizar a los educadores. Como corolario, los niños están cada vez más imposibilitados de madurar para convivir en una sociedad que por lo general es compleja.

“Lo que pica en la sociedad se rasca en la escuela, dijo un académico una vez, y expresa ciertamente lo que ocurre. La escuela siempre ha sido el escenario social más sensible donde se encuentran, se dirimen, se sufren, a veces se solucionan y se discuten los problemas sociales, y de ellos, los más delicados porque incluyen a las familias y los niños, quienes son simbólicamente los más desprotegidos y los que queremos cuidar”.

SIN DEFENSA
-Los médicos, los agentes de tránsito, al igual que los docentes son hoy víctimas de la crispación que vive la sociedad. ¿Quién defiende a los maestros?


“No quiero aparecer victimizando a los docentes, pero su vulnerabilidad es extrema. No hay estamento, ni vías ni canales para defendernos. Por el contrario, el docente es depositario de los dolores sociales y las frustraciones de la sociedad y de los padres. Uno como docente toma una decisión sobre un alumno, por ejemplo en una evaluación, y el padre viene a cuestionar la decisión, le quita toda responsabilidad al chico y pretende que el docente se desdiga de su decisión porque el chico es ‘inocente’”, señaló Noya.



“El cuestionamiento al docente como autoridad es permanente, y esto es un paso que ha dado la sociedad que puede volvérsele en contra. La escuela dejó de ser ese universo privado del niño, con reglas propias, donde aprendía a lidiar con sus conflictos, y a responder socialmente a las demandas de ese espacio”. 

“Ahora este universo ha sido mediado por  los padres que vienen a ‘defenderlo’ del docente, como si éste fuera su enemigo, y terminan gestionando los conflictos del niño. Se le quita al niño la posibilidad de aprender a convivir y a funcionar de acuerdo a las reglas de la sociedad, porque siempre los padres están tratando de torcer las reglas para beneficio de su hijo”.

 “Por eso también la inmadurez, porque el chico no sale a enfrentar sus problemas. Los padres no quieren que el niño sufra, pero cabe preguntarse si es posible crecer sin sufrir, sin vivir el trauma del crecimiento, con los dolores de responsabilizarse de sus actos, aún de saber que la vida es injusta, que la sociedad es cruel, y hay que aprender a vivir con esto”, añadió la psicopedagoga. 
“Nosotros trabajamos el tema del bullying, pero también tenemos que aprender que en la sociedad vamos a convivir con quien nos rechaza, y nos trata mal. Hay una resistencia a que los chicos maduren, y los padres levantan una barrera de sobreprotección que muchas veces desdicen apenas salen a la vereda y maltratan a sus hijos”.

EMPODERAMIENTO
-Los padres median entre los niños y los docentes, pero ¿quién media entre el docente y los padres? ¿Hay quien defienda a los docentes?

“Hay todo un cuadro de autoridad en la Educación, en el que el eslabón más fino es el docente porque se encuentran como el jamón del sándwich, entre el Estado (a través de la Inspección) y los padres. Pero el mayor conflicto surge porque ahora el sistema fomenta que se saltee al docente, al directivo de la escuela, y el padre vaya a hablar directamente con el Inspector. Esto baja como un derecho de los padres, de eludir al docente y al directivo, anulando su autoridad para resolver un conflicto con el alumno. Luego los chicos cuestionan a toda autoridad, porque lo han vivido con sus padres, y el sistema está avalando el cuestionamiento a toda norma, aún legal, y creo que es necesario que revisemos estas conductas sociales que generan valores”.

“Tenemos colegas en Quilmes que están siendo acusadas de abuso, que sabemos que son inocentes pero que son retiradas preventivamente de sus cargos, y están en su casa con el honor manchado, esperando el dictamen de una Justicia que es lenta, con padres que escrachan sus viviendas, en una indefensión total porque tampoco hay solidaridad de la comunidad docente. En fin, un tema para trabajar”.

“Le deseo a mis colegas docentes un muy feliz día, y las animo a seguir trabajando por esto tan desafiante y maravilloso, que es facilitarle el aprendizaje a los niños y adolescentes de nuestra ciudad”, finalizó Noya.



 
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