Según expusieron mediante una nota dirigida a la secretaría de Trabajo Delegación Quilmes, el plantel de auxiliares que desempeñan funciones en la cocina es de cuatro trabajadores. De ellos, uno se encuentra con licencia médica desde hace un mes y otro tiene ART desde el viernes pasado, por lo cual sólo quedaron dos.

En asamblea definieron entonces la medida de fuerza, dado que afirman que ni el Consejo Escolar de Quilmes ni las autoridades del Servicio Alimentario Escolar (SAE) dispusieron suplentes para cubrir los puestos faltantes. Asimismo, el gremio apuntó contra los directivos de la Primaria Nº 33 de Bernal, responsabilizando a las tres áreas por la suspensión del comedor escolar que entró en vigencia este martes por tiempo indeterminado, hasta que se resuelva la situación. 

“Con el personal que tenemos resulta imposible satisfacer las necesidades de este servicio. Desde ATE Quilmes exigimos que arbitren los medios para el inmediato nombramiento del personal necesario para que los alumnos puedan comer como corresponde. Hasta tanto esto no suceda, los trabajadores van a continuar con la medida de fuerza”, advirtieron.