En 1960 llegó al Cervecero, donde logró el ascenso en 1961 y jugó el torneo de Primera División en el 62 y 63, para completar cuatro temporadas vistiendo la “blanquita” con un total de 94 partidos. A principios de 1964 fue transferido a Newell's Old Boys de Rosario, donde brilló también durante cuatro años, hasta 1968. El último año de su carrera lo jugó en Gimnasia y Esgrima La Plata, en 1969. En los últimos años, solía participar de las cenas organizadas por la Asociación de Ex Futbolistas del Quilmes Atlético Club, que se celebran en el quincho del Estadio Centenario. Una enorme pérdida para todos los cerveceros, que tendrán al “Rulo” eternamente en el recuerdo.