Los dirigidos por Omar De Felippe goleaban 3 a 0 al término del primer tiempo y eran superiores a su rival. Pero los hinchas de Unión generaron disturbios, disconformes con el arbitraje del juez Andrés Merlos y se terminó suspendiendo el partido.

Otra vez ganaron los violentos. Quilmes salió a jugar ante Unión de Villa Krause y rápidamente marcó su superioridad, ganando a los 4 minutos. Pero la expulsión de un futbolista de Unión generó la ira de varios hinchas sanjuaninos que comenzaron a generar incidentes.

Mientras tanto, El Cervecero hizo dos goles más y goleaba 3 a 0 con dos de Martín Cauteruccio y uno de Facundo Diz. La violencia se acentuó y el encuentro fue suspendido en el entretiempo por el juez Andrés Merlos.

El partido empezó con Quilmes teniendo la pelota, y apenas a los 4 minutos de juego, en su primera llegada, se puso en ventaja. Miguel Caneo abrió para Ismael Quilez en la derecha, toque para Leandro Díaz, centro rasante y Martín Cauteruccio anticipó a todos en el primer palo, punteó la pelota y puso el 1 a 0.

El Cervecero ganaba cuando no había pasado nada en el encuentro y obligaba al limitado Unión de Villa Krause a buscar el resultado. Así, los espacios empezaron a aparecer y Quilmes manejaba más y mejor la pelota. De a poco Unión iba a buscar y el partido se hacía parejo, pero El Cervecero era más claro y punzante.

Así llegó a los 16, cuando Emiliano Carrasco picó habilitado, definió y la defensa sacó la pelota sobre la línea. A los 19 minutos, Ariel Sánchez cayó en el borde del área apareado con Quilez, el juez juzgó simulación, le sacó la segunda amarilla y lo expulsó.

Así, Quilmes empezó a dominar claramente el juego, ganando y con un hombre de más, tocó, encontró espacios, y a los 27 hizo el segundo. Gran pase de Caneo para Cauteruccio, que se fue mano a mano con el arquero Rodrigo Tula, lo dejó en el camino y casi sin ángulo definió con el arco vacío para poner el 2 a 0. Quilmes era muy superior y se floreaba, volvió a llegar a los 36, y la volvió a meter.

Caneo volvió a habilitar a Cauteruccio, que se fue mano a mano con el arquero pero prefirió tocar con Facundo Diz, para que la empuje y ponga el 3 a 0. El Cervecero siguió manejando la pelota, casi como si hubiera un solo equipo en la cancha, y volvió a llegar con un tiro de Pablo Mattos desviado.

La primera mitad se iba a ir en triunfo parcial 3 a 0 más que merecido, ya que Quilmes era muy superior a su rival.

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