En la mañana del viernes un inspector de AySA se hizo presente para relevar el trabajo de reparación de la calzada de la empresa contratista Cosugas, en la esquina de Alsina y Paz. El representante de la distribuidora de agua iba a aprobar el arreglo, pero debió hacer una observación ya que el bitumé se descascaraba con la sola fricción de los dedos.
Ante la polémica por las malas reparaciones de la firma, Maximiliano Mainella, representante técnico de Cosugas, explicó que el arreglo ubicado en la esquina de Alsina y Paz, publicado por PERSPECTIVA SUR el 30 de junio, “no estaba terminado” sino que le faltaba la carpeta asfáltica. “Esa era la base de hormigón, estaba rústica porque de ese modo se facilita la adherencia del asfalto”, explicó.
Este medio se acercó a dicha esquina para corroborar la afirmación del representante de Cosugas, que aseguró que ya estaba terminado el bacheo. El mismo tenía aspecto de “parche”, con un escalón de unos dos centímetros por encima del asfalto.
En ese momento se acercó el inspector de AySA, quien señaló que iba a aprobar el arreglo ya que “no se desprende, está firme”. Sin embargo, no pudo negar que con apenas la fricción de los dedos, se rompía el bitumé colocado y debió hacer la observación correspondiente.
CONTROLES
En relación a esto, Mainella admitió que “cometemos errores como cualquier empresa” y señaló que son auditados permanentemente por el Municipio y por las empresas AySA y Metrogas, “que son muy estrictas y controlan calidad y plazo del trabajo”.
“Hacemos entre 30 y 35 pozos todos los días en Quilmes. Al ser tan grande el flujo de actividades se incrementan las posibilidades de errores, pero eso no justifica que terminemos tapando y reparando mal la calzada”, sostuvo.