En diálogo con Canal 5 QUILMES, la directora general de la Escuela del Encuentro, Inés Noya, explicó que la palabra “bullyng” significa “Acoso, molestia, un desprecio hacia otra persona, es todo aquello que hace sentir a una persona indigna, rechazada o despreciada”. Esto se puede dar entre alumnos o entre profesores y alumnos. “Es un nombre nuevo, pero el fenómeno no lo es”, agregó la educadora.

Si bien Noya aseveró que en la Institución no han vivido “escenas de violencia”, cuando detectan un indicio de acoso ponen en marcha charlas con los chicos, si son muy pequeños con sus padres, “pero en los adolescentes es donde más se da”. En este marco entendió que “el trabajo con el chico es fundamental porque, si bien la familia debería formar y acompañar en esto, todo tiene que ver con el respeto por el otro o a un semejante”.

FOCALIZACIÓN
Asimismo destacó que es importante “trabajar sobre la estima: cuando un chico o un grupo se focalizan sobre otro al que ven más débil, porque pueden estar proyectando envidia o celos, hay que reunir al grupo, dialogar y generar resortes internos. Con sólo disciplinar no cambia la conducta”.

“El tema es generar empatía, ponerse en el lugar del otro a través de juegos de roles donde todos opinan, generamos acuerdos y ven cuándo uno se puede llegar a sentir mal. Esto se hace dentro del marco de la clase de Formación en Valores”.